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Acetonemia

Aliviar la acetonemia con la homeopatía

La acetonemia es un trastorno del metabolismo que afecta principalmente a los niños debido a sus bajas reservas de azúcar. Los remedios homeopáticos permiten resolver este problema de  forma natural para favorecer una curación rápida.

Utilizada como disolvente, la acetona es un líquido incoloro que se reconoce por su olor a éter. Esta sustancia química existe también en estado natural en el cuerpo humano, que la fabrica a partir de cuerpos grasos. De manera muy simple, la acetonemia corresponde a un número excesivo de acetona y cuerpo vecinos en la sangre. El porcentaje de esta sustancia en el cuerpo tiende a aumentar en caso de disturbios del balance ácido-base, en particular cuando a las células les falta azúcar, un combustible que les permite llevar a cabo su actividad. La acetonemia se produce cuando el azúcar no puede penetrar en las células o cuando hay hipoinsulinemia, es decir una cantidad insuficiente de insulina en el cuerpo que obliga al organismo a tomar el azúcar de otros componentes, como por ejemplo los ácidos grasos. La degradación de estos cuerpos grasos implica en consecuencia la formación de cuerpos cetónicos en la sangre, elementos que pueden ser puesto en evidencia con un simple análisis de orina.

Síntomas

La acetonemia se caracteriza por náuseas y vómitos frecuentes difíciles de calmar. Tras esta primera fase, el paciente afectado puede tener fiebre y sentir dolores abdominales importantes que se manifiestan sin embargo sin provocar diarrea. El enfermo pierde entonces el apetito y su aliento toma el olor característico de la acetona, que recuerda al de la manzana reineta.

Tratamientos recomendados

De manera general, la atención resulta más difícil cuando el paciente es un niño, en la medida en que los vómitos perturban su alimentación, debilitándole y cansándole. Sin embargo, los tratamientos homeopáticos permiten luchar contra la acetonemia y mejorar la situación general del paciente afectado. Por lo tanto, al comienzo de la crisis, es recomendable tomar 5 gránulos de Senna 5 CH y repetir la dosis las horas hasta que se perciba una mejoría significativa. Para un tratamiento de fondo, se recomienda tomar 1 dosis de Lycopodium clavatum 9 CH o de Sepia officinalis 9 CH por semana para aliviar los problemas más frecuentes. En caso de recidiva en niños, los medicamentos homeopáticos deberán ser preparados a partir de Lycopodium clavatum, Phosphorus y Natrum muriaticum. También es posible calmar las crisis tomando 5 gránulos de Senna 5 CH todas las horas hasta que finalmente los síntomas se atenúen.

Cuándo consultar a un médico

Frente a una crisis de acetona, es indispensable consultar a un médico sin demora, sobre todo cuando la crisis dura varias horas o se manifiesta de manera poco habitual. Así, si se detecta acetona en la orina se debe consultar urgentemente a un profesional de la salud para buscar la causa del trastorno. En efecto, sólo el médico está capacitado para dar un diagnóstico precisos que permita aplicar el tratamiento más apropiado.

Tratamientos asociados a la acetonemia

  • Lycopodium Clavatum
  • Natrum Muriaticum
  • Phosphorus
  • Senna

Importante Administrados como tratamiento de fondo,  Lycopodium clavatum, Natrum muriaticum y Phosporus son remedios homeopáticos que ayudan a reducir los riesgos de recidiva y evitan las complicaciones relacionadas con la acetonemia.

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La patología y la homeopatía son dos campos de la investigación científica que van de la mano. De hecho, la investigación en homeopatía de una enfermedad siempre está acompañada de un estudio patológico de la enfermedad. La patología es el campo científico que estudia las enfermedades, mientras que la homeopatía es un método suave para el tratamiento de enfermedades. El tratamiento homeopático sigue los principios de similitud (Similia similibus curentur o " lo semejante cura lo semejante") y la exhaustividad. No existe un tratamiento universal para una determinada enfermedad, sino que la cura debe adaptarse a cada paciente.