La gota es una inflamación intensa de las articulaciones, y se manifiesta principalmente a través de dolores ubicados a nivel de los dedos grandes y los miembros. La homeopatía ayuda al paciente a aliviar rápidamente su dolor.
La homeopatía es eficaz para tratar y mitigar los dolores causados por la gota. Apodada también a veces “enfermedad de los reyes”, la gota corresponde a una inflamación de algunas partes del cuerpo, a menudo una inflamación reumática, debida a la abundancia de ácido úrico en el organismo. La dificultad de evacuar el ácido úrico a través de la orina es uno de los principales orígenes de la gota. Cuando el ácido úrico se acumula en gran cantidad, se forman cristales de urato a nivel de los riñones, la piel y sobre todo de las articulaciones. Estos cristales son la causan del dolor intenso.
Los primeros síntomas de la gota sólo se manifiestan años después de la hiperuricemia, es decir a partir de los treinta años. El síntoma principal es un dolor punzante a nivel de las articulaciones. Este dolor se manifiesta en forma de una sensación de ardor sobre todas las partes del organismo donde se haya depositado los cristales de urato. La articulación inflamada se pone roja o hasta violácea, es sensible al tacto y se hincha. La piel de la parte afectada se vuelve lustrosa y muy tensa. En algunos casos el enfermo tiene escalofríos y fiebre. Para cada paciente, la duración de una crisis de gota depende de lo avanzado de la enfermedad, pero de manera general puede durar desde unas horas hasta 10 días. Para que el tratamiento homeopático sea eficaz y rápido, los remedios deben ser administrados desde la aparición de los primeros síntomas. Por esta razón, hasy que apresurarse en seguir un tratamiento homeopático adaptado.
El mejor tratamiento para tener un resultado positivo y eficaz para aliviar la gota es la utilización de medicamentos homeopáticos en función de los síntomas. Para una aplicación local, se puede optar por el gel Arnigel, a esparcir de una a dos veces al día sobre la parte dolorosa.
Durante las crisis convencionales, la asociación de Urtica 5CH, Ledum Palustre 4CH, Colchicum 5CH, Belladonna 7CH, Apis mellitica 7CH y Aconit 15 CH podrá aliviar los sufrimientos. Si el paciente siente dolor a nivel del tendón de achille, 3 gránulos de Benzoïcum acidum o de Guaïacum deben añadirse al tratamiento.
Si se detecta que el paciente tiene una hiperuricemia, los medicamentos homeopáticos siguientes son los más adaptados, a tomara por la mañana y por la tarde: Sulfur 5 CH si la hiperuricemia es debida a un exceso alimentario, Calcarea carbonica ostrearum 5 CH si la hiperuricemia es causada por una nefrolitiasis, Sepia 5 CH si se trata de una paciente y Lycopodium 5 CH si la hiperuricemia es observada a raíz de una intolerancia alimentaria. Este último remedio, asociado a Colchicum 5CH, ayuda al paciente a prevenir la recurrencia de las crisis. Para la gota crónica hay que tomar tres gránulos de Colchicum 5CH en la noche, Ranunculus 5CH a las 12.00 horas y Arnica 5CH por la mañana. Estas indicaciones deberán respetarse para que la eficacia de los remedios esté garantizada. Con este tratamiento, una dosis de Nux Vomica 9 CH todos los domingos a la tarde puede añadirse para un buen restablecimiento.
Una consulta médica se impone cuando el individuo comience a sentir dolor en las articulaciones y cuando las crisis se vuelvan más frecuentes. Si la enfermedad llega a una fase avanzada, es preferible a consultar a un especialista para que la afección sea tratada rápidamente. Para un enfermo con menos de treinta años, y sobre todo para un paciente que haya sufrido un trasplante de órganos o haya tenido un antecedente de insuficiencia renal crónica, la consulta de un especialista es indispensable. Si la persona que sufre de gota tiene también una urolitiasis o una artropatía crónica, es necesario consultar a un especialista. Para una gota tofácea y recaídas frecuentes, es preferible dirigirse directamente a un médico especialista.
Tratamientos asociados?
Importante Los medicamentos homeopáticos son muy eficaces para aliviar la gota si el paciente bebe mucha agua y evita consumir alimentos que reducen su acción tales como el té, café, el chocolate, la acedera, el ruibarbo, la espinaca, la charcutería, conservas, pescado grasos, crustáceos, los despojos, la carne roja y el alcohol.