La periflebitis es una enfermedad que puede generar muchas molestias por el dolor que causa. Afortunadamente, la homeopatía ofrece muchos remedios para aliviar eficazmente los síntomas de esta enfermedad.
La periflebitis es una enfermedad que afecta a las venas, y puede ser superficial o profunda. La capa externa de las venas, así como los tejidos circundantes, se irritan a causa de la formación de un coágulo sanguíneo en el interior de las venas. Este coágulo podrá posteriormente tapar la circulación de la sangre y provocar una insuficiencia venosa. La periflebitis es una enfermedad que se distingue de las varices en que aparece tras un largo período de inmovilización de un miembro. Los varices pueden complicarse y provocar una periflebitis, sobre todo a nivel de las piernas.
La periflebitis se manifiesta generalmente por dolores similares al pinchazo de una aguja a nivel de la zona afectada. La vena afectada se enrojece y endurece, y la zona circundante es dolorosa si se la toca. En el caso de una periflebitis profunda, el individuo siente dolor a nivel de la zona afectada y el miembro puede hinchrse, presentar edemas o se adormecerse al final del día. El tema puede sentir pesadez y calambres si la enfermedad se presenta a nivel de las piernas, y estos dos síntomas se vens especialmente acentuados durante la noche. Por último, la periflebitis también puede manifestarse en forma de picores a nivel de la vena irritada.
La homeopatía propone numerosas soluciones contra los síntomas de la periflebitis. Es especialmente el caso de Hamamelis, que se preconiza contra la sensación de pesadez a nivel de las piernas. Dos tomas de 5 gránulos por día de Hamamelis en una dilución de 3 a 6 H constituyen la dosis recomendada. Por el contrario, si la sensación de piernas pesadas va acompañada de la aparición de motas a nivel de la parte irritada, el remedio recomendado será Pulsatilla en una dilución de 4 a 9 H, a razón de 2 a 3 tomas diarias. Contra la congestión y la sensación de hormigueo, Aesculus hippocastanatum reduce el dolor de manera eficaz. En caso de edema, la posología recomendada es de 3 gránulos de Apis mellifica 5 CH, 3 o 4 veces al día, o Vipera 4 o 5 H, de 2 a 3 veces al día. Si la periflebitis se manifiesta sobre VARICES preexistentes, estas últimas pueden ser erradicadas con Calcarea fluorica 4 H y Zincum metal de 4 a 5 H. Finalmente, si el sujeto experimenta agujetas además de los síntomas de la periflebitis, se recomienda aplicar Arnica sobre la zona irritada.
Cuando aparezcan los síntomas, se recomienda tratar la patología con remedios homeopáticos. Sin embargo, si los síntomas persisten, se recomienda consultar a un médico. Existen algunos casos particulares que requieren recurrir a un médico, por ejemplo cuando el dolor aparece a nivel de la caja torácica. En efecto, la periflebitis puede provocar una embolia pulmonar. La consulta de un médico también se recomienda para los hombres adultos de más de 50 años, susceptibles de presentar un cáncer de próstata.
Tratamientos asociados?
Importante La homeopatía propone un tratamiento eficaz para aliviar la periflebitis gracias a sus muchos remedios. Hamamelis se recomienda particularmente porque, además de ser eficaz, presenta un amplio campo de acción.